Page 107 - La Libreta Gris - La otra crónica de Elche: 2008-2017

SEGUIMOS EXCAVANDO
"Podemos estar orgullosos de lo que hemos hecho, pero deberíamos estarlo mucho más de lo que no hemos hecho. Ese orgullo está por inventar", reflexionaba Emil Cioran. Y aunque el filósofo rumano no era precisamente la alegría de la huerta (más bien todo lo contrario: no hay más que leer los títulos de sus libros para deprimirse), me he permitido empezar con este pensamiento, ya que estamos en su centenario. Además, creo que esa reflexión viene bien en una semana realmente movida. Muchos han sido los acontecimientos que se han sucedido en estos siete días, y de signo muy diverso, pero todos giran en torno a uno de los leitmotiv de la existencia humana: la lucha por el poder y sus derivadas de orden moral, social y político. Hemos vivido también grandes revelaciones estos últimos días. Se desveló por fin, gracias a la sesión de videochat de este periódico con la lideresa popular, uno de los grandes enigmas de la política ilicitana: que Mercedes Alonso tiene un barco, mecachis en la mar. Pero no es un yate, como sus adversarios le echaban en cara, sino una lancha de siete metros y medio de eslora. Menudo chasco. Nos imaginábamos a la candidata pelo al viento y con la brisa marina acariciando su rostro mientras surcaba el Mediterráneo a bordo de una lujosa embarcación de varios pisos, y ahora resulta que lo más cerca que ha estado de esa imagen fue cuando hace dos años se marchó de crucero (y encima se encontró en el barco a Alejandro Soler, que ya es coincidencia). También se nos reveló a través del chat otro gran enigma: su sueldo. Cobra 3.000 euros, y además, de la Diputación, con lo que le ahorra los emolumentos a sus paisanos. Habrá quien no se lo crea. Siempre hay algún malpensado.
La cuestión patrimonial de la lideresa popular se ha visto acompañada estos días por las sospechas que los socialistas han arrojado sobre las propiedades de su consorte (en régimen de separación de bienes). En concreto unos terrenitos junto a la zona donde supuestamente se instalará Ikea en Alicante, y en trámite de recalificación. Es lo que pasa cuando uno tiene terrenos, que en cuanto se descuida, se los recalifican y adiós al sueño de hacerse un huertecito con tomateras y melones. El pleno del lunes se enfangó un poco en este asunto, pero Alonso rió la última: se dio el gustazo, aunque sea ya al final del mandato, de ver perder a Soler y al PSOE su primera votación en una sesión plenaria. Abandonados, como un mal desodorante a media tarde, por su socia Àngels Candela en el tema del
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