Page 200 - La Libreta Gris - La otra crónica de Elche: 2008-2017

quedan esos cuatro años de desgaste personal y político, que no se los quita nadie. Ahora la situación puede dar un giro radical si el juzgado admite la querella presentada –se supone, porque no hemos vuelto a saber nada más de ella desde de que Antonio Rodes lo anunciara por lo bajini– por el PSOE contra Alonso por la retirada de la exclusiva a Blanca González. En caso afirmativo, la alcaldesa se estrenaría como imputada y viviríamos otra nueva etapa de judicialización de la actividad política y municipal, que tan buenos ratos nos ha hecho pasar en los últimos tiempos.
Pero no pensemos en cosas malas ahora que nos disponemos a disfrutar de un tiempo de hermandad, fraternidad y austeridad. Eso sí: con los mismos villancicos de todos los años en el belén de la Glorieta, que siguen sonando impertérritos y ajenos a la crisis, a la prima de riesgo, al ministro Wert, al presidente Rajoy y a la cancillera Angela Merkel. Qué ilusión: algo que no ha ido a peor. Era imposible en este caso. (16/12/12)
EL GRAN SALTO
"Señoriiiito!", gritaba con su gracejo habitual e inigualable Gracita Morales en una de las películas de aquellos casposos años 60 que la lanzaron al estrellato y que posteriormente hemos ido revisando con otros ojos, para confirmar desde la distancia que, en efecto, en su mayoría eran unos bodrios, pero que también había algunas buenas cintas y actores excelentes. Manolo Latour, que es un cinéfilo, además de funcionario en excedencia y concejal, y tal vez conocedor de que por la noche echaban por la tele uno de los mejores filmes de aquella época, Atraco a las tres, con presencia de la genial actriz cómica, sacó a colación su nombre en el pleno del lunes para compararla con el proceder de la socialista María Dolores Asencio. Le dijo, más o menos, que se asemejaba en sus argumentaciones a Gracita, pero sin tener que estudiar para actriz, de forma espontánea. Vamos, una manera de decir con ironía tirando a sarcasmo que lo suyo era de risa. Asencio, como también es funcionaria –aunque no en excedencia–, reprimió por educación la contestación al edil de Hacienda que la mayor parte de sus compañeros de bancada y público esperaba: "Pues usted, señor Latour, se parece a Antonio Ozores, que cuanto más habla menos se le entiende". Pero se mordió la lengua. Es lo que tienen los socialistas cuando están en la oposición, miden mucho sus palabras para no ser como eran los populares
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