Page 296 - La Libreta Gris - La otra crónica de Elche: 2008-2017

militantes, no pudo disimular la emoción –pese a ser abogado– y se le escapó alguna que otra lagrimilla, que atribuyó a la alergia. No era para menos. Había sido un parto largo y complicado, tanto que en el paritorio la gestora transmutada en equipo obstétrico estaba pensando en practicar una cesárea, porque ya estaba cumplida. La criatura electoral estaba colocada de nalgas, como resistiéndose a salir, y por mucho que se la animaba desde el exterior con La Internacional versión karaoke y nocturnos de Chopin, no había manera. Al final, la lista vio la luz a base de fórceps, pero se quedó sin padrinos, porque Loli Asencio y Ramón Abad no pudieron aguantar tanta tensión y se marcharon de puente. Tuvieron que asumir ese rol Antonio Rodes y Blanca González, aunque de momento no se han puesto de acuerdo aún en el nombre que le pondrán. La cuestión es que, presentada la sonrosada candidatura en sociedad y repartidos entre la concurrencia los consiguientes puros y coloretes (ojo, sin distinción de sexo, cada uno cogió lo que quiso), ahora hay que alimentarla para que esté bien desarrollada de aquí al 24M.
Así que solventado lo del alumbramiento, lo primero que ha hecho el pater familias es reunir a todos sus efectivos para que se vayan conociendo. Es lo que suele suceder en las bodas y bautizos, que aparecen familiares de uno y otro cónyuge que, pese a estar emparentados por mor del enlace, no se conocen. Aquí ha pasado lo mismo. "Hola, soy Tal, y soy de Carlos, ¿y tú?", se presenta una integrante de la lista a otro compañero. "Yo soy Cual, y soy de Rodes", responde el interlocutor. "Oye, ¿y tú de quién eres?", le espetan ambos a un tercero. "Pues yo, ni soy de uno ni de otro, sino todo lo contrario", contesta el otro. "Está claro, este es de Pepe Pérez", convinieron. Y así siguió la reunión, haciéndose amigos mutuamente. Quedaron con su jefe de filas que en el próximo encuentro llevarían una pegatina con su nombre y filiación familiar socialista para facilitar las cosas. González, siempre tan metódico, tomó nota en su iPad, envió un tuit y lo colgó en su muro de Facebook, comprometiéndose además a estudiar las distintas opciones de material adhesivo y el tipo de los rotulador para someterlos a la pertinente aprobación de la gestora. En cualquier caso, se les veía ilusionados a los integrantes de la candidatura del borrón y cuenta nueva. A todos menos a Héctor Díez, que seguía un tanto circunspecto tratando de desentrañar por qué es el único superviviente del actual grupo municipal en la lista. González ya se apresuró a aclarar que con esta criba no quiere juzgar la labor de los actuales ediles, sino que simplemente se abre una nueva etapa. Menos mal, seguro que esa aclaración les quita a todos los
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