Page 343 - La Libreta Gris - La otra crónica de Elche: 2008-2017

en gana. Pero que ello no se interpretara como una muestra de división, sino de sano intercambio de pareceres, gustos y opiniones. Así se reflejó en acta, por lo que pudiera pasar. Total, que llegó el desfile carnestolendo y la expectación era máxima entre la ciudadanía, ansiosa por comprobar si finalmente el tripartito se fundiría con el pueblo y la puebla. Alguien en la Plaça de Baix creyó vislumbrar a la primera autoridad bajo un disfraz de Rey León y a algunos de los concejales socialistas –Patricia Macià, José Manuel Sánchez y Pepe Pérez, entre ellos– camuflados de suricatos, facóqueros, jirafas y demás fauna de la sabana, en torno a su jefe, aunque algo inquietos por la presencia de un cercano grupo de hienas, que no pudo ser identificado por los conspicuos observadores. El supuesto conjunto fauno-socialista desfiló a los sones de la batucada y cantando el consabido "Hakuna matata, vive y deja vivir./ Hakuna matata, vive y sé feliz./ Ningún problema debe hacerte sufrir". Un número muy aplaudido por el público, aunque algo falto de conjunción y ritmo.
"Mira, mira, esa seguro que es Cristina Martínez", aseguraba un señor del PP a otro sin filiación conocida. "Sí, esa que va disfrazada de The Flash, que con su velocidad supersónica es capaz de estar trabajando, salir pitando para llegar a tiempo a la comisión municipal y volver a la faena sin que se den cuenta", apostilló. "Pues mira qué te digo, yo creo que es la que va detrás con el disfraz de Wonder Woman", replicó el no afiliado. "¡Qué va, si esa es Mireia!", contestó el del pepé. "No, esta que pasa ahora no; la que va detrás". "¡Pero si ese disfraz no es Wonder Woman, sino la Mujer Invisible, de los 4 Fantásticos!". "Pues por eso, esa sí que es, seguro..." Y así un buen rato. Mientras la comitiva carnavalesca seguía su recorrido, las miradas del público continuaban a la caza (en el sentido visual de la expresión) del político. De pronto, las miradas se dirigieron hacia un grupo de walking deads (vamos, los zombis de toda la vida, valga la paradoja), a cuyo frente marchaba una especie de Morticia Addams, que un militante socialista identificó como Mercedes Alonso y sus muchachos/as regresados/as de ultratumba en pos de cualquier encarnación mortal del tripartito. Parece ser que uno de sus acompañantes tenía cara de Vicente Granero cabreado y otro, de Justino Delgado con su habitual sonrisa, pero con tanto maquillaje las sospechas quedaron en eso. Un tipo disfrazado de palmera se asoció inmediatamente a JR Pareja, pero parecía más alto y con más pelo, con lo que también hubo quien pensó que se trataba del concejal medioambiental, el compromisario Antonio García, agazapado dentro del tronco de una datilera a la espera de dar buena cuenta con su tirachinas de cualquier
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