Page 164 - La Libreta Gris - La otra crónica de Elche: 2008-2017
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contundente por parte del vilipendiado e incluso de sus compañeros de bancada. Tal vez. Pero responder al desacertado comentario del teniente de alcalde con la marcha en bloque del pleno se antoja desproporcionado. Sobre todo porque, al igual que sucedió con la otra salida en bloque socialista en el pleno de febrero, los titulares se los lleva el abrupto abandono de la sesión plenaria y la trifulca política consiguiente, y apenas se mencionan en las crónicas los hachazos al bolsillo que conllevan los nuevos presupuestos municipales. Ahí es donde se supone que los socialistas debían de haber mordido hasta el hueso. Lo tenían todo a favor para salir victoriosos del partido: no hay nada más apetecible para la oposición que un debate con unos presupuestos rebosantes de recortes y de subidas de impuestos, tasas y demás. Pero nada: partido perdido por abandono. Y encima, desde el PSOE se acusa a los populares de haberles obligado a marcharse. Los populares aún no han dicho nada, pero podrían replicarles perfectamente con aquello de "si no sabes torear, pa qué te metes".
En política hay que tener cintura para encajar los golpes con el menor daño posible y rapidez de reflejos y certeza en la pegada a la hora de devolverlos.
Probablemente el PSOE sacarían mayor rédito político, y los ciudadanos (votantes suyos y otros que no) valorarían mucho más que, a pesar de los ataques personales y otras adversidades y penurias que afrontan en su labor de oposición, se mantengan firmes y atentos en sus asientos rebatiendo los argumentos del equipo de gobierno para justificar la subida de impuestos y el recorte de servicios. La marcha socialista del último pleno no habría pasado de ser un hecho anecdótico si no fuera porque dos meses antes habían hecho lo mismo. ¿Seguirá el PSOE marchándose de los plenos a la mínima referencia personal hacia cualquiera de sus miembros, familiares o allegados? O si les siguen recortando las intervenciones, derechos de réplica, etc. De ser así, Mercedes Alonso y los suyos han dado con el botón para anular a la oposición en la única sesión de carácter público que celebra la corporación (en la que, por otra parte, se ha reducido el aforo: cuantos menos testigos, mejor). Cuando se pongan bordes los sociatas bastará con que Latour, Vicente Granero o Manuel Rodríguez o Sebastián Polo le saquen alguna cuestión personal a Pérez o Alejandro Soler (Antonio Rodes es más cartesiano y aguanta mejor estos envites: le gusta el cuerpo a cuerpo, cuando le dejan) para provocar la marcha del grupo socialista. "Pues mire qué le digo, señor Tal, es usted un calamandurrio integral y un gaznápiro de tomo y lomo, tirando a sarnacho mastuerzo", le espetará el
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