Page 123 - Riegos El Progreso
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   Un nuevo problema se le planteó a la empresa en el año 99 –que por cierto sigue sin estar resuelto  años después-. El Ayuntamiento de Elche decidió el cambio de alineación en la acera de Levante de la entonces llamada Plaza del  de Julio, la actual Plaza de la Constitución, al construirse el edificio propiedad de Joaquín Serrano, cuya planta baja ocupó durante muchos años la Caja de Ahorros Provincial. Al igual que otros propietarios, El Progreso veía amenazada así su fachada a dicha plaza, obligada en un futuro a un retranqueo forzoso. El 0 de mayo de 99, el Ayuntamiento presidido entonces por José Ferrández Cruz desestimó la rectificación de la acera proyectada, solicitada tanto por El Progreso como por otros vecinos afectados.
En 960 por primera vez encontramos en las actas del Consejo de Administración referencia a enlaces sindicales en la empresa. En el verano solicitaron sin éxito una paga con motivo de las fiestas de agosto y en septiembre se conoció la nueva reglamentación que afectaba a las industrias de la electricidad y el agua. Tales reglamentaciones suponían un aumento anual de 00.000 pesetas en la retribución del personal. Tal aumento llevaría al Consejo de Administración, como se hace referencia en la Memoria de 960, a plantear una fórmula paramétrica, es decir, solicitar a la Administración un aumento del precio de agua en función de los gastos salariales que la empresa tuviera que hacer efectivos. El año 960 El Progreso se vio obligado a modificar su línea eléctrica por exigencias de Hidroeléctrica Española y se produjo una avería de importancia en la turbina Kaplan del Salto de Hoya de García. En 96, de nuevo se producía una venta de una parcela propiedad de la empresa en la partida de Alzabares Bajo y al año siguiente se renovaba el parque móvil con la compra de una camioneta Land Rover y un SEAT. También en 96 encontramos la primera referencia a la Comunidad de Regantes de El Progreso, al oponerse a la petición de aumento del precio del agua.
La década de los sesenta se caracterizó por una fuerte subida de los salarios para una plantilla que se mantenía en torno a los 0 trabajadores. Así, el convenio colectivo de 1965 significó un aumento diario de 45 pesetas por día trabajado. La venta de agua, sin embargo, permitió asumir tales aumentos. El precio máximo de la hora de agua a lo largo de la década creció entre las 60 pesetas de 960 a las 0 pesetas del año 90, es decir, un crecimiento en diez años del ,%.
CUADRO 24
VENTA DE AGUA EN PESETAS (CANAL Y LA MARINA). 1960-1969
960 .9.69,00 96 ..00,00 96 ..9,00 96 6.6.6,00 96 6.60.,00

 



























































































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