Page 191 - Agua, Tierra y Capital
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los citados ravals. Por ello, la observación de su plano no aporte una informa- ción suficiente para abordar el tema de la construcción. Otro factor importan- te sobre este sector será la importancia de las reformas de las casas, tanto de fachadas como de interiores, a cuyos datos hemos tendido acceso gracias a la importante serie documental comprendida entre 1884 y 1886701, que el archi- vo conserva sobre los permisos de obras que se solicitaron y se concedieron durante la época. Es importante tener en cuenta que dichos permisos de obras suponían un aporte considerable en las maltrechas arcas municipales, y quizá por ello, se observa tanto celo administrativo en estas actividades de la cons- trucción. Asimismo, conviene advertir que muchas de estos permisos para re- formar fachadas, patios, o desagües encubrían obras de construcción de mayor envergadura, como la elevación de pisos superiores, que pretendían eludir los respectivos impuestos municipales. A continuación, presentamos dos gráficos en los que podemos observar la evolución de parte del sector de la construcción a través de las citadas solicitudes de reforma y construcción de nuevas vivien- das o pisos superiores.
No obstante, dicho crecimiento vertical –tan marcado en el carácter de la contemporaneidad- no quiere decir que no se diera un uso extensivo del suelo. Lo hubo, y ello significó la destrucción de innumerables huertos de palmeras, hecho que provocó la primera reivindicación del palmeral como patrimonio histórico de la ciudad, en un momento en que ya se podría hablar de especula- ción inmobiliaria. El abanderado de dicha reivindicación fue Pedro Ibarra, el primero en reconocer el valor patrimonial e histórico del palmeral.
No sabemos exactamente qué porcentaje de la población activa pudo con- centrarse en el sector de la construcción, pero según los datos que aporta Miran- da, basados en el padrón del año 1900, estaría ligeramente por encima del de los alpargateros, ya que alcanzaría el 12 % de la población activa, mientras un 11,8 correspondería a los alpargateros, y un 11,5 se dedicarían al zapato. Conviene advertir que el sector de la madera, íntimamente relacionado en esta época con la construcción, concentra un 21 % de los trabajadores e incluso supera al por- centaje de población empleada en el textil, que era de un 20 %.702
El desarrollo de la industria auxiliar de la construcción en Elche es también un indicio fundamental para observar la magnitud del sector durante el perio- do, que se intensifica sobre todo a principios de la década de los noventa y se
701 La serie aparece incompleta, no sabemos si el Ayuntamiento relaja su celo administrativo, pero a partir de 1887 y hasta 1903 los documentos de solicitud son muy escasos, descienden más del 90 %.
702 MIRANDA ENCARNACIÓN, José Antonio.: Hacia un modelo industrial... op. cit. p. 35. 191
 




























































































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