Page 111 - Riegos El Progreso

Donativo para la Institución de la lucha Antituberculosa atendiendo el ruego del Excmo. Gobernador Civil de la provincia.
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El accionista e histórico dirigente socialista Germán Penalva Mendiola propone a la Junta General que la Sociedad costee una estatua dedicada a Ernesto Martínez Riviere. Carlos Antón Antón secunda la propuesta pero realizándose conjuntamente con el Excmo. Ayuntamiento de Elche.
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Cuota única de .000 pesetas para la Capilla de Santa María y .000 pesetas para la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.
El Consejo de Administración encarga al escultor de Murcia Juan González Moreno una estatua de mármol por la cantidad de 0.000 pesetas (se inaugura con motivo de las fiestas de agosto).
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Se suscriben cinco obligaciones de .000 pesetas cada una para atender la reconstrucción de la iglesia de El Salvador (a pesar de la situación financiera de la Sociedad por la falta de agua en los meses de julio y agosto que obligó a solicitar del Banco de Vizcaya saldo en contra).
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Donación a la parroquia de El Salvador de los dos títulos amortizados por sorteo que importan .000 pesetas como parte del préstamo hecho para su reconstrucción. El Consejo igualmente dona a dicha parroquia las 6.000 pesetas, resto de las 0.000 entregadas.
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Con motivo de las bodas de plata de la Sociedad celebradas el  de abril se celebra una misa por las almas de todos los accionistas y empleados fallecidos. La Sociedad concede además por este motivo los siguientes donativos: .000 pesetas para el Asilo de Ancianos, .000 pesetas para Auxilio Social y 00 pesetas para la Conferencia de San Vicente de Paúl de Elche.
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Cuota única de 10.000 pesetas por los damnificados en el terremoto de Managua.
En definitiva, una forma de colaboración a la fuerza que resulta interesante conocer porque estamos hablando de pagos que ninguna empresa se podría librar fácilmente. Al margen de la importante contribución para la restauración o nueva construcción de las iglesias de Santa María, El Salvador y Sagrado Corazón de Jesús, resulta significativa el pago de una cuota mensual a FETJONS. Si, como es de suponer, todas las empresas ilicitanas de un cierto nivel se vieron obligadas a pagar semejante impuesto –00 pesetas mensuales desde 90– resulta evidente que a la famosa revolución pendiente no le faltó precisamente financiación.