Page 108 - Agua, Tierra y Capital
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soluciones a la pregunta y la que discrimine entre las tres respuestas. La inmensa mayoría de los industriales o fabricants son propietarios de tierras –de diverso tamaño-, otros proceden de esa clase media de profesionales liberales, funcionarios o políticos, y algunos responden al perfil de pequeño comerciante o artesano. Por consiguiente, la respuesta es una síntesis de las tres, pero, en la que predomina el origen agrario del capital inicial. Es conveniente tener muy en cuenta que para impulsar una industria alpargatera no era necesario un gran volumen de capital, como ocurría en otros sectores, tal es el caso de metalúrgico o incluso en algunos casos el textil, esta característica facilitará el acceso a muchos miembros de la clase media urbana e incluso a pequeños propietarios de establecimiento comerciales. El origen manufacturero de la industria abarata los costes de inversión, y facilita esa acumulación primitiva326 que permite la acumulación y circulación capitalista: El primer movimiento que efectúa la cantidad de valor puesta en funcionamiento como capital consiste en convertir una suma de dinero en medio de producción y fuerza de trabajo [...] La segunda fase del movimiento, el proceso de producción, finaliza tan pronto como los medios de producción se convierten en mercancías cuyo valor excede el valor de sus partes integrantes.327. Si el movimiento de dicho capital es cíclico, y genera beneficios que en parte son invertidos en la mejora de la empresa, nos encontramos ante la receta básica para el desarrollo del capitalismo, receta pronto adoptada por la burguesía ilicitana, que con un pequeño capital será capaz de crear industria alpargatera que a veces atraerá incluso un capital inmigrante.328 Este carácter supondrá un factor dinamizador, pero, como dice uno de los empresarios más importantes de esta época, Sansano Fenoll, también se convertirá en un mal endémico producto de la debilidad de sus empresas, la mayoría pequeñas o medianas, y sobre todo, carentes del elemento necesario, el capital.329
Por ello, aunque no dispongamos de series documentales suficientes para la hallar la tasa de inversión de los fabricantes en los años finales del siglo, sí es evidente dejar claro que en estos años el capital local creó capitalistas330 locales, y las industrias ilicitanas vivieron el primer despegue en torno a 1890-1900, intervalo en el que no podemos olvidar la estrategia asociativa, que muchas empresarios siguen para dotar de mayor volumen ese capital inicial, sobre todo en el caso de la industria textil.
326 BERG, Maxine.: La era de las manufacturas... op. cit., p. 80.
327 MARX, Karl.: El capital... op. cit. p. 474.
328 SEVILLA JIMÉNEZ, Martín.: La industria en Elche... op. cit. p. 56.
329 MIRANDA ENACARNACIÓN. José Antonio.: Hacia un modelo industrial... op. cit. p. 119.
330 VILAR, Pierre.: Crecimiento y desarrollo... op. cit. p. 85.
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